La evolución espiritual,es un fenómeno presente en el hombre,cuando transciende lo material,mundano,máyico,al tomar consciencia de su origen inmaterial,energético,intangible,como partícula divina,alma o espíritu.Generalmente,este proceso interno y vivencial,no está exento de dificultades,dolores,sufrimiento,confusión,enfermedades,sin sentido o haber tocado fondo en la existencia.Sin embargo,producto de la Ley del Karma,también existen personas,que expontáneamente,se tornan espirituales y evolutivas,por haber acumulado,en sus vidas pasadas,acciones desinteresadas y dadivosas con sus semejantes,guiados por una fe y voluntad positiva,con mucha ética para vivir.
En mi caso particular,después de llevar una vida de mucho dolor y sufrimiento,por escazes de bienes materiales y servicios,pésimas relaciones interpersonales con los demás,falta de oportunidades para crecer y desarrollarme integralmente,enfermedades invalidantes y que mantengo controladas,gracias al Yoga y los médicos;vivencié un progresivo,pero lento proceso de recuperación,tanto espiritual,mental y físico,que me hecho comprender,aceptar y perdonar a mi mismo y las personas,que de una o otra forma,me causaron daño severo en la vida.No obstante,el evento,que gatillo la reforma a total,a la óptica personal de ver y enfrentar la vida,fue el terremoto y tsunami,ocurridos,el fatídico 27 de febrero del 2010.
El horror de experimentar la cercanía de la muerte física de los demás y la mía propia,en un edificio de departamentos a punto de colapsar.El encontrarse desprovisto de amparo,bienes,dinero,seguridad frente al hostil medio social y natural.Son muestras del terror,que un individuo vivencia junto a las traumáticas réplicas del terremoto,los amenazantes maremotos;la enfermedad de mi padre,mi sobrino,en medio de estas circunstancias;el temor a los saqueos,que por divina voluntad no vivenciamos,directamente.
No obstante,si no fuera por la caridad y buena voluntad de mi hermano,que nos brindo acogida y techo,en su hogar que resistió el sismo y las réplicas,después de haber perdido el nuestro,los bienes,el dinero y comodidades;no estaría narrando,en estas líneas.
Poco a poco,nos fuimos recuperando material,mental y espiritualmente,como familia y seres sociales.Mis enfermedades pasaron,a segundo plano,y llegué a la convicción,que si sobreviví a un evento de la naturaleza,de esa enorme magnitud y grado destructivo,junto mis seres amados,mi vida debía cambiar,en un 100%;no sólo internamente,sino que en el exterior,también.
Tengo la certeza,que nada es al azar,y que lo sucedido tiene una razón cósmica,que escapa a mi total comprensión,pero intuyo, a pesar de la confusión y dolor,tiene que llegar a buen puerto.La agonía de mi padre,su doloroso proceso de cuidado y atención a sus necesidades,producto de su deterioro físico,que lo dejó inválido y que vivimos,tanto para él y el resto de la familia,fue otro hecho traumante,que me marcó y cambio mi visión de la vida,zamarreándome profundamente,en lo más hondo de mi alma;más cuando estaban presente las réplicas y la difícil situación económica de la familia.
Sin embargo,a pesar de las tragedias nacionales y familiares,que pudiesen haberme destruido,en más de alguna forma,me permitieron superarme frente a la adversidad,que ya no sólo eran mis enfermedades,sino elementos objetivos y crueles,que transformaron,radicalmente,en cuestión de instantes,mi actitud egoica y me convirtieron,en un ser más consciente del ser,de la fe y voluntad positiva,frente a las dificultades.
Creo,que no es necesario e indispensable,que todas las personas pasen por situaciones límites para mejorar como personas o despertar del sueño del ego,pero en algunos casos se hace básico.No todos los individuos son iguales y requieren estímulos diferentes,para revolucionar la consciencia.¡Namasté!.
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